Para la laminación en frío se parte de bobinas de chapa previamente laminadas en caliente, a las que se somete a un proceso de decapado a fin de conseguir una limpieza de la superficie de cualquier tipo de impureza, óxido o herrumbres. Tras este tratamiento se procede a reducir su espesor hasta el nivel que se desee. La chapa laminada en frío o chapa blanca, es tremendamente versátil, siendo su principal aplicación en la industria de la automoción.

También se puede encontrar la chapa laminada en frío en la fabricación de muebles metálicos o electrodomésticos de línea blanca.

  • Normas de fabricación: EN10130
  • Calidad: DC01-DC02
  • Formato: 2000X1000 mm/ 2500X1250 mm / 3000X1500 mm